Franco Casañas tuvo su partido homenaje en Trebolense

Franco Ezequiel Casañas tuvo su partido homenaje en la tardecita del sábado en Club Atlético Trebolense.

El “Mostro”, como le dicen, se despidió de la actividad en junio del 2022, tras jugar en el club desde el año 2007 –con lapsos en Bolivia, Atlético Sastre y Americano–, haber metido 220 goles con la del “Celeste” y un total de 247 en su carrera por la departamental.

La institución, le preparó una velada plagada de sorpresas y emociones en la cancha que lo vio hacer tantos goles.

Con un gran marco de público, la jornada se dividió en dos partidos de 50 minutos cada uno, con figuras, familiares, jugadores en actividad y amigos del “Beto”.

El recibimiento fue en el círculo central, entre volcanes de papelitos plateados, humo celeste y blanco y el ingreso con sus hijos Samuel y Yudith. En el campo, también estaban su esposa, su hermano, sus padres y gran parte de su familia.

En lo futbolístico, primero se midieron un combinado de la Liga San Martín y “Amigos de Franco”, con el resultado a favor de los primeros 5 a 1. Entre los amigos, jugaron varias figuras de nuestra Liga, de ayer y hoy. Germán Lemos, Franco Tamagna, Néstor Dell Orto, Carlos Rodríguez, David Buosi, Leonardo Gorostiza, Lisandro Dellavía, Alejandro Togachinsco y Mauricio Vaschetto, fueron algunos de los que se sumaron a la partida.

En el segundo cotejo, se enfrentaron Trebolense Campeón 2008 y Trebolense Campeón 2012. Figuras recordadas como Martín Rodriguez, Ariel Ladner, Alberto Bravo y Germán Castillo, se sumaron a los locales de cada uno de esos equipos. El anecdótico resultado, fue 4 a 2 en favor del equipo del 2012.

Los árbitros invitados fueron Enrique Ramón Gación, Eduardo Ariel Lucero, Norberto Moyano y Gustavo Edgardo Franco.

Con gran emoción, el goleador recibió una plaqueta de parte del presidente de Trebolense, Federico Brussa; una camiseta Nº 9 de manos de Rubén Molinero y Daniel Bacci; un arco forjado en metal de Carlos César; una casaca de árbitro de los jueces del encuentro y obsequios de la familia.

“Dejé todo por este club y le agradezco por este partido, que para mí fue soñado. No pude dormir en toda la semana de la ansiedad y los nervios”, señaló Casañas entre lágrimas, en el cierre de lo que fue, sin dudas, una noche mágica.