Una promesa a la bandera y el eterno grito de ¡Viva la patria!

Fue un 20 de junio diferente. Un Día de la Bandera emotivo. Un Teatro Cervantes colmado y un puñado de emociones que circulaba por las venas de cada alumno, de cada padre, de cada maestro o maestra.

El lunes, casi 300 niños prometieron lealtad a la bandera argentina, en una ceremonia cargada de emociones comprimidas en 30 minutos, bajo la organización de la dirección de Cultura y Gestión Institucional de la Municipalidad de El Trébol.

Desde el “Saludo a mi bandera”, en la voz de la alumna de la Escuela de Música Layla Diep Asef y el piano del profesor Juan Pablo Rossi, hasta el Himno Nacional Argentino, interpretado por ellos mismos y acompañados por el Coro Municipal de Lengua de Señas y 64 alumnos de la Escuela Belgrano; y la marcha a “Mi bandera”, cantada por el propio Rossi, pasando por los alumnos de la Escuela Manuel Belgrano con su interpretación y su preciosa bandera en el escenario. Hubo emoción y más de una lágrima.

No había lugar en el Centro Cultural en el que no hubiera una bandera, una escarapela o una cinta con los colores patrios. No había rincón en el que no se recordara la insignia patria y ese sentimiento bien argentino.

La promesa de lealtad estuvo en la voz de una intendente Natalia Sanchez, de frente a casi 300 niños al grito de “¡Sí prometemos!”. Lluvia de globos celestes y blancos y banderitas en todo el salón, le dieron un marco verdaderamente emotivo a un acto que culminó con pan de leche y chocolate para todos los niños y grandes y ese grito inmortal de ¡Viva la Patria!.